Reseña 77: Los renglones torcidos de Dios (Torcuato Luca de Tena).

Valoración personal:

Fecha de publicación: 2008 (Original: 1979)

ISBN: 978-84-08-08135-7
Número de páginas: 439
Editorial: Planeta

SINOPSIS 

"Alice Gould es ingresada en un sanatorio mental. En su delirio, cree ser una investigadora privada a cargo de un equipo de detectives dedicados a esclarecer complicados casos. Según una carta de su médico particular, la realidad es otra: su paranoica obsesión es atentar contra la vida de su marido. La extrema inteligencia de esta mujer y su actitud aparentemente normal confundirán a los médicos hasta el punto de no saber a ciencia cierta si Alice ha sido ingresada injustamente o en realidad padece un grave y peligroso trastorno psicológico.".

Vaya, vaya... Pedazo novelón me he leído sin quererlo. Este libro llegó a mis manos de una forma curiosa -bueno, tampoco es gran cosa, pero a mí me hizo gracia jajajaja-. Mi padre trabaja en un colegio y en muchas ocasiones me trae libros que se van a ir a la basura para que yo les dé un mejor uso (queridos ratones: los libros no se tiran, seguro que hay alguien dispuesto a darles una nueva oportunidad). Siempre me traía los típicos libros de segundo de ESO o así, libros que no me llamaban la atención para nada. Un día, llegué a casa y tenía este libro sobre mi escritorio. "Otro libro dramón que no me gustará para nada", pensé. Ah, pues no. Leí la sinopsis y me di cuenta de que parecía interesante y que tenía que leerlo sí o sí. 

Abrí el libro y leí lo primero que aparecía:

"Los renglones torcidos de Dios son, en verdad, muy torcidos. Unos hombres y unas mujeres ejemplares, tenaces y hasta heroicos, pretendes enderezarlos. A veces lo consiguen. La profunda admiración que me produjo su labor durante mi estadía voluntaria en un hospital psiquiátrico acreció la gratitud y el respeto que siempre experimenté por la clase médica. De aquí que dedique estas páginas a los médicos, a los enfermeros y enfermeras, a los vigilantes, cuidadores y demás profesionales que emplean sus vidas en el noble y esforzado servicio de los más desventurados errores de la naturaleza".

¿No os he dejado súper intrigados? Porque esas palabras a mí me dejaron loquísima. Más loca me quedé todavía cuando leí el prólogo de Juan Antonio Vallejo-Nágera, un aclamado psiquiatra que nos expone cómo el autor acudió en su búsqueda para pedirle ayuda: quería ser internado en un hospital psiquiátrico como cualquier enfermo para poder documentarse de primera mano. Además, le pidió al doctor miles y miles de libros para poder plasmar de una forma verídica qué se escondía tras las paredes de los hospitales psiquiátricos. Eso me gustó, porque escribir por escribir no.

No quiero hablaros mucho sobre la trama porque quiero que lo descubráis vosotros mismos al leer el libro. Con lo que la sinopsis dice ya os imagináis por dónde van los tiros: ¿será Alice Gould una enferma mental o estará en realidad investigando un crimen mientras se hace pasar por enferma?

Este libro iba camino de convertirse en uno de mis favoritos y casi casi casi casi casi casi lo consigue. ¿Que por qué no lo consiguió?

→ Ya me ha quedado claro que Alice Gould es más que súper inteligente y guapa: no hace falta que me lo repitas mil veces. 

→ Ya sé que estuviste en un hospital psiquiátrico y que quieres que no te quede nada en el tintero pero... No hace falta que me describas todo con tanta claridad, me gusta terminar de imaginarme cómo son las cosas. Demasiadas descripciones. 

→ No nos olvidemos de las continuas descripciones de los personajes. Lo normal es que me presentes al personaje y luego, cuando vuelva a aparecer, me digas el nombre simplemente. No, aquí no. Cada vez que entra un personaje en escena es descrito como si fuera la primera vez que aparece.

Estas tres cosas son lo único que me ha echado un poquito para atrás y que no me han permitido darle un cinco sobre cinco. Por lo demás, todo me ha encantado. Ha habido miles de reflexiones que me han hecho pensar, el libro está lleno de post-its por todas partes.

"No te preocupes por ellos -le decía a Dios- por... por... porque... todos son equi... equi... ¡eso es!... equivocaciones tuyas. Son los den... renglones torcí .. torcidos, de cuando abren... abren... ¡eso es!... aprendiste a escribir. ¡Los pobres locos -continuó ahogado por los sollozos- son tus fal... faltas de orto... ortografía!" (Sergio Zapatero, uno de los enfermos del hospital psiquiátrico)

La verdad es que al principio me costó engancharme a la historia por lo que he dicho antes: descripciones eternas (ah, por si fuera poco, tras haber descrito mil veces a cada uno de los personajes durante la narración, al final del libro tienes una lista con todos los personajes de la historia... por si se te han olvidado), pero luego caían las páginas una tras otra a una velocidad extrema. También es cierto que había bastantes laísmos y palabras que no entendía (mi madre, también conocida como "mi diccionario", estaba hasta el gorro de mí preguntándole cosas), pero aun así me ha gustado cómo trata la historia. ¿Por qué? Si nos fijamos en la trama en sí, no es gran cosa porque puede incluso  resultar predecible y tampoco es que haya grandes giros argumentales; lo importante en esta novela es cómo se trata la locura, la enfermedad y la paranoia. 

Por otra parte, he odiado a la protagonista y eso hace que la ame profundamente. Sí, habéis leído bien. Es uno de esos personajes que hace que pienses, que no te deja terminar de pillarle, que no te da toda la información aunque te deja saber que no lo sabes todo, es carismática y juega con todo el mundo con una inteligencia que hace dudar al más listo (mirad sino cómo vacila a todos los integrantes del hospital). Además, me haya gustado más o me haya gustado menos, no ha sido una lectura que me ha dejado indiferente así que eso es un gran punto a su favor.

En definitiva: os recomiendo esta lectura sin duda alguna :)

Me despido por hoy, muchas gracias por leerme y recordad: LEER ES UN PLACER, NO UNA OBLIGACIÓN.