Novelas Románticas Eróticas, ¿por qué no?

Hello little readers! Habréis notado que el blog está cambiado, ¿os gusta el nuevo diseño o qué? ¿Qué os parece a vosotros? Bueno, para hoy tenía pensado escribir sobre Megan Maxwell, que fuera mi autora del día. Ese tipo de posts me dan más trabajo que el resto porque supone un "mayor trabajo de investigación", como me duele muchísimo la espalda y no tengo muchas ganas (¿para qué mentiros?)... así que he cambiado de idea. Hoy me apetece debatir un poquito, dar mi opinión y compartirla para ver qué opináis vosotros :)

*Antes de nada, disculparme si utilizo algún que otro término obsceno, hay veces que no encuentro sinónimos adecuados para lo que quiero decir jaja*

NOVELAS ROMÁNTICAS ERÓTICAS

Voy a contaros un pequeño cuento sobre mi primera vez (no la sexual ¿eh?, a ver si ahora al haber leído el título de la entrada os creéis que os voy a contar mi vida por aquí jajaja).

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Rocío, chica inocente donde las haya, fue a una librería a por su siguiente víctima literaria. No sabía muy bien qué libro escoger, entró por entrar a ver qué encontraba. "Este no me gusta, este tiene una portada horrible y no me transmite nada, este es demasiado corto, este tiene la letra demasiado pequeña, ... Espera un momento, ¿y este? Anda, mira qué graciosos, tres ositos de gominola colocados de manera que parece que están haciendo un trío."

"¿De qué irá este libro?" Leyó la sinopsis:

"Alba es periodista de vocación, es soltera y sobrevive en Lavapiés. Alba pierde su empleo, pero Gabi le consigue una entrevista. Alba ahora es secretaria y se siente frustrada. En su primer día de trabajo cruza la mirada con un hombre en el metro. Ese hombre es Hugo. Sexy, provocador y horriblemente deseable. También conocerá a Nicolás, enigmático e inquietantemente atractivo. Y... todo se complica cuando Hugo y Nico le proponen un juego..."

Rocío decidió comprarse el libro, se enamoró de Hugo desde la primera página en la que hizo su aparición, se acabó de leer el libro en menos de lo que canta un gallo y fue rápidamente a la librería a por la siguiente parte de la serie (#MiElección de Elísabet Benavent: Alguien que no soy, Alguien como tú, Alguien como yo, Tras las huellas de Alba Nico y Hugo). Se comió todos los libros de la serie en tiempo récord y, una vez acabados, decidió buscar más libros de este género porque le encantó.

Entró en otra librería a ver qué encontraba pero no fue fácil, no sabía cómo denominar ese tipo de libros para que la señora cajera le ayudara amablemente (nótese cierta ironía, recuerdo que hablar con ella era parecido a hablar con un rottweiller enfadado). Por suerte, apareció otra mujer que parecía tener alguna que otra luz más en el cerebro, así que Rocío fue a por ella. Le daba muchísima vergüenza decirle algo así como: "sí, ese tipo de libros en los que hacen el amor de forma bastante explícita, ¿sabes lo que te quiero decir?" Así que estuvo rápida de mente y le preguntó si tenían más novelas de Elísabet Benavent o de otros autores que escribieran el mismo estilo de novelas. La señora, más que adorablemente, la guió por un sin fin de estanterías y de pilas de libros hasta llegar a la zona señalada como "Novela Romántica Erótica". A Rocío le chocó ver a tanta gente enfrente de esas estanterías, todas mujeres y desde adolescentes a mujeres más adultas. Se dijo a sí misma "menos mal, no soy la única cachondona salida a la que le gustan estas cosas". Así, Rocío se hizo con su siguiente víctima y luego con otra, y luego con otra, y luego con otra... así hasta hoy.

FIN

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Desde el momento en el que empezaron a gustarme este tipo de novelas me han dicho de todo: "eres una guarra", "¿pero cómo te puede gustar esto?", "¿necesitas follar más?", "¿no te dan lo que necesitas?, "con la de libros que hay y tienen que gustarte estos", y bla bla bla.

Para empezar, para gustos los colores y cada cual hace lo que le venga en gana. ¿Qué me gusta leer esto? Lo seguiré haciendo, te guste o no :). Por otra parte, se puede opinar sobre lo que sea pero siempre desde el respeto y lo que NUNCA se debe hacer es juzgar las elecciones propias de los demás.

Al principio, cuando vi "novelas románticas eróticas" pensé... ¡oh Dios mío! Seguro que son todo porno-books, esos en los que no hay trama alguna y solamente se dedican a crear fantasías sexuales al relatar de forma más que explícita como practican sexo los personajes. Me equivoqué. Es más, en algunas obras (no voy a decir que todas son buenas y que se centran más en la trama, más que nada porque hay libros de todo tipo) incluso se centran más en la historia que tienen entre manos los personajes, más que en lo sexual. Yo a veces digo que un libro de este tipo es como cualquier otro con la diferencia de que cuando hacen el amor lo lees como si estuvieras tú mismo haciéndolo. 

Quizás sea porque vivo la vida, o al menos lo intento, sin estereotipos. No me gustan las etiquetas, cada quién es libre de su cuerpo y de su mente (siempre y cuando eso no impliqué dañar al resto, claro está). El sexo es algo que tiene lugar entre parejas (obviamente hablo del sexo con amor, no de ese que tiene lugar con un desconocido un sábado noche entre litros de alcohol y en el baño de la discoteca) y que se basa en el respeto. A partir de la base del respeto y del consentimiento de ambas partes, todo está permitido. Antes de empezar a leer estos libros tenía una opinión distinta, como Alba (la protagonista de la novela que os he puesto más arriba). Alba conocía el sexo convencional, el tradicional, divertido y juguetón pero no más allá. Gracias a Hugo y a Nico comienza a descubrir un nuevo mundo que le atrapa pero al mismo tiempo le hace sentir culpable y degenerada. Pues no Alba, ¡no!. Si a ti te gusta, te llena y no haces daño a nadie... sigue con ello. Lo mismo ocurre, por ejemplo, con Judith (la protagonista de la serie de libros de Pídeme lo que quieras de Megan Maxwell). A Alba le preocupaban las relaciones de pareja a tres bandas, sin embargo a Judith le preocupa el sexo con juguetes y el intercambio de parejas (tanto con hombres como con mujeres). O también está el caso de Anastasia (la protagonista de 50 sombras de Grey de E L James), a la que le preocupa el tema sadomasoquista.

Este tipo de libros me ha enseñado muchas cosas. No me refiero a que he aprendido nuevas cosas sobre sexo (que también, madre mía la de cosas que nos quedan por descubrir jajaja). Me ha ayudado a entender que no a todo el mundo le gusta lo mismo, que no todo el mundo disfruta con las mismas cosas y que no hay un modo preestablecido de vivir la vida. 

Hagas lo que hagas siempre va a haber alguien que te diga algo malo, es imposible que todos estemos de acuerdo en algo (si lo pensamos bien, si todos fuéramos iguales todo sería muy aburrido). Simplemente, aunque sea difícil, hay que pasar de las malas lenguas: por cada mala lengua hay 100 buenas. Debemos dejar de fijarnos en lo malo y centrar nuestra atención en lo bueno :).

Para concluir, deciros que no os cerréis en banda y os neguéis a probar este tipo de literatura (estoy segura de que el 90% de personas que se niega a hacerlo lo hace sin conocimiento de causa, está claro que no a todo el mundo le tiene que gustar pero al menos lee una novela o dos y a partir de ahí establece tu propio juicio crítico). Lo novedoso siempre es bienvenido, puede que te guste y puede que no, pero al menos ya habrás leído algún libro más y diferente a lo que sueles leer :).

No hay que juzgar un libro por su portada (nunca mejor dicho), que hable de sexo no nos tiene que hacer retroceder, el sexo no debería ser un tema tan tabú en pleno siglo XXI (luego vamos de modernos ... ).

No tengáis miedo, si os apetece leeros este tipo de libros... hacerlo, a pesar del que dirán. Repito, a lo mejor no os gustan pero bueno... ya sabéis que no os gusta :) Ahora solo tenéis prejuicios hacia algo que no conocéis (hablo en general), darle una oportunidad.

Me despido por hoy, muchas gracias por leerme y recordar: LEER ES UN PLACER, NO UNA OBLIGACIÓN.